El Centro de la Mujer de Tocopilla está ubicado entre las calles Santa Rosa y Matta, y su teléfono es el 552 421372.

El Centro de la Mujer de Tocopilla entregó un reconocimiento a nueve niños que participaron en la campaña del Lazo Blanco, destinada a generar conciencia en los hombres, comprometerlos a prevenir y sancionar la violencia ejercida contra mujeres.

Esta campaña, realizada por cuarto año consecutivo en la ciudad portuaria, tuvo como propósito elaborar un vídeo con la entrega de diversos mensajes de estudiantes varones de primer año de enseñanza básica a segundo año de enseñanza media de los nueve establecimientos educacionales existentes en Tocopilla, como la escuela Pablo Neruda y el Liceo Domingo Latrille.

La coordinadora del Centro de la Mujer, Natalia Marambio Olivares, explicó que este tipo de campañas tienen por objeto “llamar la atención de la grave situación que viven las mujeres en sus hogares, muchas veces sin tener redes de ayuda necesarias que les permitan pedir ayuda u orientación respecto de lo que puede hacer para escapar de este tipo de delitos, denunciar y ser tratadas”.

Al Centro de la Mujer de Tocopilla, para cuyo funcionamiento cuenta con el respaldo del SernamEG y de la municipalidad, han ingresado de enero a julio de este año 46 mujeres para participar en un proceso de ayuda sicológica y social que puede durar meses, mientras que otras 119 han solicitado orientación puntual en este tema.

Datos proporcionados por la Fiscalía Regional consignan 152 causas de violencia intrafamiliar tramitadas en el primer semestre de 2022 correspondiente a Tocopilla y María Elena, mientras que Carabineros y la Policía de Investigaciones de Tocopilla han recibido en conjunto 51 denuncias por violencia intrafamiliar contra mujeres en el primer trimestre del año.

Durante el acto de reconocimiento, donde estuvieron presentes a además representantes de la Delegación Provincial de Tocopilla y del municipio, la sicóloga del Centro de la Mujer, Danitza Valera Caul, dictó un taller para explicar las distintas manifestaciones de la violencia de género a las que deben prestar atención las mujeres y las personas más cercanas.

La ocasión permitió contextualizar además los orígenes de la campaña que se remontan a 1989 cuando murieron 14 universitarias en Canadá.